13 marzo 2010

>> Dominion, o el efecto bola de nieve_

Porque de efectos voy a hablaros. Y es que el ritmo de publicación de juegos de mesa es tan elevado actualmente (y pese a la crisis) que últimamente creo que las editoriales han entrado en una especie de vorágine por hallar el nuevo Catán (bueno, creo que eso es así siempre), el juego que comience una nueva ola en el mar, mmm... no mejor, océano de juegos. Y más ahora que Catán aparece incluso en los lugares más insospechados y que la gente que no juega lo juega porque es como casi, el Monopoly (y la exageración es un recurso literario como cualquier otro, ¿vale?)

Otro efecto lo sufro yo y creo que mucha más gente, y es que es imposible conocer toooodooos los juegos que salen, o te especializas muy mucho, con lo que solo ves un árbol, o te dejas llevar por el bosque. Visto lo visto, siendo la meta encontrar el mejor juego, tanto por editoriales como por jugadores, yo hace tiempo que adopté la Posición del rey (mira, este término me ha gustado) que se basa en: si algún juego es bueno, ya llegará el solo hasta mi... (y te pones a mirar de reojo por encima del hombro). Y debo decir que la cosa funciona, no me absorve la cantidad, y la calidad sale a flote.

Bien, uno de estos juegos fue, inevitablemente, Dominion de Donald X. Vaccarino, editado aquí en España por Devir. Dominion es un juego, en principio, para 4 jugadores (aunque he jugado con más y rula), en el que en tu turno, juegas una carta (acción), compras una carta (comprar) y robas hasta cinco cartas de tu mazo (robar)... y te acabo de explicar el juego. Bueno, vale, te acabo de dejar a cuadros, lo sé. Pero tampoco me he alejado tanto.

El señor Vaccarino, bajo mi punto de vista hizo algo tan sencillo como dar la vuelta a los juegos de cartas coleccionables... y es que en Dominion nos encontramos con una caja básica que contiene 500 cartas, todos los jugadores juegan con las mismas cartas. vale, muchas repetidas, es una de las gracias, cada carta o conjunto de estas tiene un efecto (veis, de efectos va el asunto) que se aplica cuando se juega, y este efecto modifica las reglas de lo que te he explicado más arriba, a lo mejor ahora tu turno es, juego una carta (acción), vuelvo a jugar una carta(acción), compro una carta (comprar) y robo hasta tener cinco cartas en mi mano (robar). Claro si compro una carta cada turno, y todo el mundo empieza con 10 cartas en su propio mazo, eso quiere decir que ahora debo tener...mmm... 12 cartas en mi mazo (he comprado dos veces ya). Aplicando efectos, tras efectos, tras efectos de cartas, voy modificando mi mazo, que cada vez se hace más grande como una bola de nieve cayendo por un pendiente... y si no tienes cartas suficientes en tu mazo, vuelves a mezclar los descartes o cartas utilizadas, el ciclo que es un no parar...

Como veis la vuelta esta dada, en Dominion el juego esta en construir tu baraja de cartas (para todos las mismas) durante el juego, acumulando los efectos que cambian las reglas del juego, para conseguir ganar la partida. O conseguir comprar las cartas que incorporadas a tu baraja te dan puntos de victoria.

Por eso hay 500 cartas...

el juego

Son todas las que estan y estan todas las que son (espero)

Pero claro, esas 500 cartas se quedan cortas... y es que el juego es tan adictivo, y se juega tan rápido después de unas cuantas partidas, que al final vas directo al combo. Hay auténticos profesionales de este juego... en serio. Así, que las expansiones de juego eran inevitables, actualmente ya hay dos publicadas en español. Terramar e Intriga, o Intriga y Terramar, tanto monta, monta tanto. Con nuevas cartas, y nuevos efectos...

Otro efecto más fue que ganara el Spiel des Jahres del año 2009, y uno detrás de otro fue sumando más y más premios, haciendo honor a la propia filosofía del juego, cual si de cartas fueran.

partida

Lo juego, tanto el tío, como el sobrino, el abuelo y la abuela.

Pero... (si otro efecto, o causa, vete tu a saber) yo he supuesto que Dominion era darle la vuelta los juegos de cartas coleccionables, pero algo parecido la suma de cartas a una baraja durante el juego se da en Starcarft, ese peacho de Epic Size de Fantasy Flight Games, con las cartas de combate y tecnología. Es solo una curiosidad, una coincidencia. Que es normal que se dé con tanta gente pensando. Suerte que hay otras personas que no pensamos...

Tiene una cosa mala el puñetero juego, y es que como la bola de nieve que cada vez baja más rápida por la pendiente, si todos los jugadores de la mesa se conocen un mínimo las cartas... aunque esto no es verdad, con que haya uno que se las conozca la pasa. Como te despistes te quedas sin turno. No, no es otro efecto de las cartas, es que el juego es tan adictivo que no te das cuenta y con las ganas de jugar tus cartas, porque ese combo lo llevas pensando tres turnos de juego, eres capaz de ponerte a jugar tu turno saltándote al jugador de tu derecha. ¡Cuidado!.

Tanto magiqueros (jugadores de Magic), como jugadores ocasionales se ponen a jugar a este juego y les gusta, supongo que de ahí su éxito también. Espero que con este éxito Dominion pueda mejorar la única cosa mala, que, y esta en serio, tiene. Y es que como Magic al principio, algunas ilustraciones no "acompañan" del todo al conjunto de la imagen del juego, pero será que el éxito, como el turno, les ha llegado muy rápido.

un mano de cartas

Acciones, Tesoro y Victoria... toda una filosofía de vida

Sobre Dominion se ha hablado, se habla y se hablará mucho. Jugadlo que esta claro que merece la pena.

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