17 mayo 2011

7 Wonders, ¿Hacemos otra?...

A ver, llega un momento que el nivel de saturación de todo friki, pasado cierto número de tres cifras de juegos en su estantería, hace que se plantee que no puede ir comprando juegos como si fuesen pepinillos. Llega un momento que hay que seleccionar... o como es mi caso que ellos me seleccionen a mí. Es decir, me explico: yo sé que si un juego merece la pena, que si es bueno, que si la gente juega, tarde o temprano me llegará a mí. Vamos que utilizo la peña como cedazo, en lugar de recorrerme geeklist o la lista de novedades de Essen de arriba a abajo. Además que los últimos años encontrar algo en esas lista en un agobio flipante (demasiados juegos, muchos)

La cajita muy mona ella. Foto de Acetate BGG
Y así es como me llegó 7 Wonders, un juego de Antoine Bauza (Ghost Stories, Mistery Express), ilustrado por el genial Miguel Coimbra (Smallworld), editado por esos belgas locos de Repos Production y aquí distribuido por Asmodee... puff, puff. Las fichas estas cada vez son más extensas...

Ostras sí, el juego puede ser jugado en nada, se explica en nada, pero se juega por 3 a 7 jugadores, claro 7 maravillas, 7 jugadores. Pero en la caja hay reglas para jugar dos. Y como el juego es bueno, se juega en nada y otra vez nada, porque una vez acabas la primera partida lo normal es jugar otra. Es que vamos, la pregunta de ¿Hacemos otra? sale seguro

Pero vamos al lío. El juego, tal y como indica el título va de construir una de las siete maravillas del mundo antiguo (más o menos, eh?). Y para hacer eso tenemos un buen montón de cartas, con las que se hacen combos, unos tableros que representan las diferentes maravillas, unas moneditas que en la primera edición eran unas fichitas de madera y en la segunda unas monedas troqueladas. Y por ultimo fichas varias para puntos... así a groso modo. Puestos ya en situación, 7 Wonders para mi al menos, es una extraña mezcla entre los juegos llamados de Deck-Building (pero sin serlo) que ya sé que se compara mucho con el Dominion, pero bien pensado como que no, y juegos como puede ser el San Juan (un juego buenísimo verdad?) muchisimo mejor que Race for the Galaxy (venga esas piedras).

La idea es ir avanzando nuestra civilización, a base de un Draft de cartas (es decir, pasa una mano de cartas, tu eliges una y pasas el resto), estas cartas se combinan entre sí para conforme avanza la partida ser cada vez más poderosos, e incluso para afectar a los jugadores que tenemos a los lados. Porque nuestros rivales directos, no son todos, son aquellos que están a derecha e izquierda. Hay tres rondas de juego, durante las cuales van entrando a juego diferentes mazos de cartas, cada vez mejores. Y a todo esto tenemos (si queremos) que ir completando nuestra maravilla. Esto es opcional, pero todo hay que decirlo que construirla nos aportará unas muy buenas ventajas.

Los componentes del juego en su primera edición, las monedas ahora son troqueladas. foto: Peter B

Hasta aquí parece que el juego es uno más, pero quizá lo mejor del juego no es como se juega, si no como se juega. Vamos que podría ser muy complicado, combos, civilizaciones, cartas, fichas, maravillas. Pues no, el juego tiene la gran virtud de ofrecer todo esto con una sencillez de juego pasmosa, y por su sencillez, rapidez (pardiez). Además se consigue explicar en muy pocos minutos. ¿Y como consigue esto? primero, las cartas no tienen texto, existen cuatro normas respeto a estas y como funcionan, el resto es ir sumando (así que nada de leer efectos). Todo es muy evidente, y aunque es normal que en la primera ronda vayamos un poco lentos, en la segunda ya estamos jugando el velocidad experto. Bueno va, luego llega ese punto profundo donde no solo te planteas tu estrategia, si no como fastidiar al vecino. Y aquí el juego se acerca a San Juan, una carta la usas como lo que representa, como descarte para conseguir monedas o como un paso más a completar tu maravilla, que aquí el jugador pillastre utiliza esto para que esa carta no llegue a usarse en contra suya. Una carta, tres usos posibles.

Y a todo esto ocurre casi lo mismo con la maravillas, cada cual tiene dos caras. Una para principiantes y otra para jugar con reglas más complejas (aún así conservando la simplicidad)

 A mi me fascinan estos juegos sencillos, que son capaces de manejar dos o tres ideas y estructurar todo un juego, pero que tengan esa pizca de ser completos. De que te dan la sensación de jugar con múltiples acciones, de hacer algo importante. Podría durar perfectamente una hora y media, pero no, dura 30 minutos, bueno, quizá 45. Y te llena tanto, que quieres repetir, sabes que esa jugada estaba mal hecha y sabes que puedes hacerlo mejor.

Unas cartas de ejemplo, vale tienen texto pero es el nombre cojona!. foto: Chris Miller


Defecto profesional, pero creo que el uso del color y los símbolos en su justa medida es un gran logro de 7 wonders. Y las ilustraciones de Coimbra lo adornan perfectamente. Se corría el riesgo de que quedase soso, pero el protagonismo del dibujo en la carta ayuda en todo.

Esta es la cara B, como en los vinilos viejos. Foto: Nathan Morse

Del 7 wonders se hizo una maravilla especial, el Manneken Pis de Bruselas con motivo de Essen 2010. ¿Que bien nos sienta el humor verdad? (porque eso de ahí es un birra, ya sabe buen bebedor...). Por lo que veo se podía conseguir mediante la BGG Store, pero ahora mismo o yo soy un cegato o simplemente ya no está. Aunque siempre queda el PnP (Print and Play) desde la misma BGG se puede descargar sendos PDF con sendas caras, pillad cartulina de tapas, imprimid, pegad y jugad... las reglas de esta cara B son cachondas porque sí.


Foto: Eric Martin
Y aún hay más, ya esta anunciada la primera expansión del juego llamada Leaders. Para que los sepáis inglés es obvio de que irá ¿no? pues sí, vamos a tener cartitas de los más conocidos líderes de las naciones más conocidas. Habrá que irse con ojo con Nerón... y si digo Nerón es porque Leaders no solo llevará estas cartas, además traerá una nueva maravilla romana y unos cuantos aderezos más, como nuevas cartas de Guilds y unas cuentas monedas más.

Y necesito llenar unas cuantas líneas más para que el texto me cuadre con la imagen, cachislá... a ver...

Me ha dicho un pajarito que los líderes son autenticas bestias pardas, y que añaden un nivel de "cabronez" considerable. Por si no fuese poco ya con las cartas de Guerra. Estos se repartirán en un draft aparte del resto y se irán jugando conforme avance el juego.

Supongo que tal y como con el juego básico el español estará presente igual desde el principio y los chicos de Asmodee (que aún no han sacado 22 manzanas en español) nos lo traerán para vosotros queridos frikis.


Conclusión: 7 Wonders además de satisfacer al friki promedio, es un buen juego para presentar algo con más enjundia a aquel que necesita saber algo más que el Monopoly, gran virtud, sí señor.


pd: mira, al final me han sobrado líneas y todo.

2 comentarios:

  1. <span>  Bueno, ya jugué, no está mal,es entretenido y un poco azaroso de más, diría que es un juego de adaptarse a lo que te va tocando, aunque si no te fijas mucho poco se puede influir en los puntos directos de tus rivales, quizá un poco con la parte militar por un lado e intentando bloquear los recursos que necesita el otro para subir su maravilla, si es que su habilidad es fuerte, al fin y al cabo, si lo bloqueas para evitar que gane 5 puntos, no sé yo.. los puntos que dejas de ganar suelen ser muchos más de los que perjudicas al otro, y de paso te olvidas de que tienes muchos más rivales a los que favoreces perdiendo los dos unos pocos puntos.
    </span>

    <span>  Luego está el tema de que hay cosas que son poco relevantes, merece la pena conseguir puntos tecnológicos?... un ejemplo,si te lanzas a por eso y consigues 6 cartas verdes: 3 distintas y 2 de ellas iguales te dan 7pts + 4pts + 4pts = 15 por 5 cartas? con 3 edificios azules seguramente consigas lo mismo y te sobran 2 cartas para hacer más puntos. </span>
    <span>  </span>
    <span>  Se</span> me ocurren dos cosillas,
        una si se podría jugar por equipos con jugadores alternados,
        y otra cómo sería llevar un marcador de puntos de victoria, aunque quizás sea un poco tedioso, pq cada vez que juegas una carta, y alguna que otra vez cuando lo hace tu rival, tocaría subirlo. Creo que solo queda la opción de usar una aplicación calculadora de puntos para el final :s

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  2. Pues claro que es juego de adaptación! es que esa es una de las gracias. Si como tu propones se fuesen contando los puntos a cada jugada esto ya no sería tan divertido. Esa parte de incertidumbre es fundamental, es lo que te provoca que después de una partida te des cuenta de tus errores y quieras volver a jugarlo.

    No hay nada poco relevante, todo influye, y tu decides durante la partida de que cojeas y en que te esfuerzas.

    La idea de jugar por parejas puede estar chula, pero habria que hilar fino para hacer una reglas. A mi de pronto no se me viene una idea clara. Pero molar, puede molar

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